Dicen que hay una delgada línea entre el amor y el odio.
La hay.
Me casé con un idiota.
En ese momento no lo sabía.
Llegó como un extraño apuesto y me hizo perder la cabeza.
Me enamoré locamente, como la chica ingenua que soy.
Luego me dejó varada.
Resulta, que yo no era nada más que un plan de negocios para el playboy multimillonario, Marcus Tandem.
Necesitaba estar casado con el fin de ganarse el negocio de su abuelo, y yo fui la pobre victima en su camino.
Creí en lo que teníamos, hasta que la verdad mostró su fea cabeza.
Jamás signifiqué nada para Marcus. Ni una maldita cosa.
Con mi mundo girando sobre su eje, la chica que una vez fui hace mucho tiempo había muerto.
En su lugar, él dejó esta cáscara vacía y sin emociones.
Puede que le haya hecho un voto a Dios, de amarlo y apreciarlo hasta que la muerte nos separe, pero es tiempo de que le regrese a Marcus, exactamente lo que él me dio a mí.
Tiene que pagar.
Y lo pagará.
Ya sabes lo que fue para mí.
Sabes lo que él hizo.
Sabes del fuego que dejó dentro de mi alma cuando me aplastó en mil diminutos pedazos.
Desde Marcus, mi vida ha sido empañada con vacío.
Desde Macus, no ha habido nada.
Estoy sola, mi madre se está desvaneciendo y no siento nada más que vacío. Trabajo mucho, trabajo duro, pero ¿por qué? No hay nada más por qué luchar.
Sé que tengo que enfrentarlo.
Sé que tengo que regresar.
Arreglar mi vida, tengo que romper mis lazos con él.
Ver a Marcus de nuevo me destruirá, pero es tiempo de terminar esto. No espero las retorcidas y amargas emociones que siento cuando lo veo de nuevo, y cuando pierdo todo una vez más, gracias a él, la única cosa en mi mente es venganza.
Pero, ¿cómo haces daño a alguien que aún a amas tan profundamente? ¿Cómo puedo aún amar a un monstruo? ¿Cómo puede él aún hacerme sentir algo?
Nuestra historia es la más complicada de todas, de lejos hermosa, de lejos perfecta, es sólo un retorcido desorden de emociones que ninguno de los dos sabe como arreglar.
Pero lo haremos.
Ya lo veras.
